Coordinadora del proyecto: Ana María Gómez Lorenzo, profesora de francés del IES El Brocense de Cáceres.
Este intercambio se desarrolló entre el 1 y el 11 de abril del 2025 con un grupo de 17 alumnos de 3º de ESO, con una inmersión lingüística y cultural en EL COLLEGE LOU Blazer de Montbéliard CON un proyecto y un programa con actividades para mejorar las habilidades lingüísticas, descubrir la gastronomía, la historia y patrimonio cultural y los aspectos ecológicos con actividades donde el espíritu emprendedor se desarrolla ampliamente para enriquecimiento personal y educativo de los estudiantes.
Los intercambios escolares entre países suponen un enriquecimiento educativo y personal para el alumnado que participa en ellos tan importante que merece la pena dedicar un comentario como prueba de ello.
El alumnado se sumerge en la cultura de otro país, en nuestro caso en Francia, más concretamente en Montbéliard, una ciudad que da nombre al Pays de Montbéliard, un conglomerado de hasta 32 ciudades y pueblos que suman unos 120.000 habitantes situados en la región francesa de Franche-Comté, lindante con la Alsace y a escasos kilómetros de Suiza y Alemania. Su punto estratégico nos ha hecho conocer las fortificaciones militares y arquitectónicas defensivas inexpugnables construidas en la zona como el castillo de Belfort o la historia de la ciudad de Montbéliard con el castillo de la ciudad de los duques de Wütemberg. Conocer estos castillos, su forma geométrica defensiva en estrella y sus múltiples puentes levadizos y pasadizos o forma en la que están construidos estos castillos, auténticos laberintos para aquellos que intentasen tomarlos, supone un modo de conocer no solo el arte sino la ingeniería defensiva y modos de supervivencia. Nuestro alumnado, tuvo que adentrarse en los diferentes castillos, descubriendo el entramado defensivo de ellos y apreció que realmente resultan inexpugnables y difíciles de atacar.
Otro aspecto que descubrimos mediante el intercambio y que nos resulta útil para desarrollar el espíritu emprendedor es la ecología. En el Centro que estuvimos el huerto no solo tenía los BRAC, los depósitos para crear el compost, que secuestra literalmente el CO2 de la atmósfera, eliminándolo, sino que además es el mejor abono para la tierra y los cultivos. En nuestro Centro tenemos también producción de compost, aunque la preparación del Centro nos ha sorprendido pues también tienen hotel para insectos y palomas y para las aves, que puede ser aplicable en nuestro Centro. Además de descubrir en las distintas ciudades que hemos visitado cómo en las alcantarillas, el mensaje escrito en el pavimento es “La mer commence ici” (el mar comienza aquí) o descubrir letreros y paneles que aún no tenemos en nuestras ciudades y que son indicativo de la conciencia ecológica de la sociedad francesa en cuanto al respeto de la naturaleza y el deseo de preservación, de hecho, el reciclaje, y la reutilización forman parte de la cultura francesa. En todas las ciudades, existen zonas de mercadillo para venta de productos de segunda mano y en los Colegios los mercadillos para traspasar, ceder o vender productos utilizados con algún fin benéfico es habitual semanalmente o con cierta asiduidad.
En cuanto a la gastronomía el espíritu emprendedor dando a conocer los platos típicos regionales con la Asociación de la saucisse montbéliardaise ha sido prueba de ello, invitándonos a degustarla, siendo presidenta, una de las periodistas locales de Montbéliard.
El deporte también se ha visto influido en Montbéliard por el ámbito empresarial, ya que es la Peugeot, surgida en Sochaux, población del Pays de Montbéliard, el que es principal patrocinador del Club de Fútbol del Montbéliard, invitándonos a uno de los partidos con el Club de Versailles.
La Peugeot de hecho expone en su museo todos los inventos que fabricaba y vendía desde principios del siglo XX, siendo insaciable el ingenio y la superación de esta familia, fabricante de tantos electrodomésticos y propulsora de la automoción en Francia. Conocer es apreciar y valorar el espíritu emprendedor y anima a nuestros alumnos a crear e imaginar.
Y en el ámbito científico, el hecho de tener un Pabellón o Museo de las Ciencias “Pavillon des Sciences” en el Centro de la Ciudad con múltiples actividades y exposiciones demuestra el espíritu emprendedor de la ciudad y cómo se desea acercarlo a la sociedad y especialmente a los niños y jóvenes. La exposición que visitamos centrada en los descubrimientos a partir del error son prueba de ello.
La Peugeot, de hecho, expone en su museo todos los inventos que fabricaba y vendía desde principios del siglo XX, siendo insaciable el ingenio y la superación de esta familia, fabricante de tantos electrodomésticos y propulsora de la automoción en Francia. Conocer es apreciar y valorar el espíritu emprendedor y anima a nuestros alumnos a crear e imaginar.
Exponemos junto a este comentario la prueba gráfica de ello con fotos que adjuntamos, mostrando a pequeña escala lo positivo y beneficioso de los intercambios para adquirir nuevos conocimientos y abrir la mente a nuevas experiencias y proyectos y para el desarrollo de determinadas cualidades en nuestro alumnado como por ejemplo las habilidades sociales, la toma de decisiones y la resolución de conflictos y problemas. El alumnado conoce otras realidades y puede detectar necesidades y oportunidades y a partir de ahí innovar.
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